Si estás a punto de empezar una obra en altura y necesitas un andamio, es posible que te preguntes qué tipos de andamios existen y cuál es el que mejor se adapta a tu trabajo. En el artículo de hoy te contamos qué tipos de andamios hay, para qué se usa cada uno y te damos las claves para saber cuál es el que necesitas alquilar para empezar tu obra.
¿Cómo se pueden clasificar los andamios?
Lo primero que debemos tener en cuenta es que los andamios pueden variar mucho de un modelo a otro, dependiendo de características de distinto tipo. Estas son algunas de las clasificaciones posibles:
- Según su función: Dependiendo del trabajo que vamos a realizar y de sus características, los andamios se pueden clasificar en categorías como los andamios de trabajo, de seguridad, de uso público, de apeos y apuntalamientos, etc.
- Por uso: De forma similar a la categorización anterior, los andamios según su uso se pueden tipificar en andamios de interior, de exterior, para fachadas, estructurales, de circulación, etc.
- Según su fabricación: También es habitual encontrar tipos de andamios agrupados según el material del que están hechos. En este caso, podemos hablar de andamios de madera, de metal, mixtos, de fibra e incluso de bambú.
- Según su estructura: Esta categoría analiza la forma en que se apoya y estructura el andamio. En este caso, podemos encontrar andamios de plataforma autoelevadora, de apoyo simple, anclados, en volado, colgantes o de ruedas.
Los 5 tipos de andamios más utilizados
Como ves, existen multitud de andamiajes diferentes, además de múltiples formas de categorizarlos. Sin embargo, queremos explicarte cuáles son los más comunes y para qué sirven, para que puedas acceder al alquiler de andamio que mejor se adapta a lo que necesitas.
1. Andamio europeo
Este tipo de andamio es el que abarca una mayor zona de trabajo. Se caracteriza por estar compuesto de módulos y distintas alturas, a las que se accede a través de escaleras y trampillas en la plataforma. El alquiler de andamio europeo es uno de los más frecuentes, ya que es uno de los tipos de estructuras más utilizados.
2. Andamio de fachada
Como su propio nombre indica, están pensados para reparar y mantener fachadas. Al utilizarse sobre todo en tareas cortas de reparación de fachadas, se componen de piezas provisionales y adaptables, que toman la forma de la fachada. Al igual que el andamio europeo, alcanza una gran capacidad de trabajo y se puede acceder a las distintas zonas a través de escaleras y trampillas.
3. Andamiajes colgantes
Al contrario que los anteriores, los andamios colgantes se suspenden, en lugar de tener su base en el suelo. Normalmente, cuentan con dos ganchos de los que se cuelgan, que están anclados en una superficie a mayor altura. Este andamiaje se regula en altura, por lo que es apto para realizar trabajos de ancho limitado.
4. Andamios de caballetes o borriquetas
El andamio de caballete está pensado para obras de mucho menor tamaño. Este se estructura sobre dos caballetes o borriquetas que elevan en altura una pequeña plataforma. Esta es tu opción si tienes que realizar trabajos de tipo doméstico o simplemente que tengan una superficie de trabajo limitada.
5. Andamios de ancho doble
Este tipo de andamios se utiliza cuando la carga que tiene que soportar el andamio es más pesada. Así, se refuerza la seguridad, ya que la superficie del andamio es el doble de ancha que en la mayoría de andamiajes generales. En este caso, estamos hablando de anchos de 1,35 m, que permiten una mayor fluidez a la hora de moverse y una mayor capacidad para soportar materiales pesados.
Ahora que conoces los tipos de andamios que existen, te invitamos a que eches un vistazo a los alquileres de andamios disponibles en tu localidad. En Equipzilla te proporcionamos el contacto de todos los alquiladores de tu zona, por lo que encontrarás estructuras de todo tipo: andamios de cremallera, andamios móviles, tubulares y un larguísimo etcétera. Escoge el tuyo y empieza tu obra cuanto antes.