Las tarimas flotantes son la mejor solución de suelos para tu vivienda hoy en día, ya que ahora hay opciones mucho más económicas de las que había hace algunos años. Si tú también te estás planteando instalarla, te damos consejos sobre cómo colocar tarima flotante en casa.
¿Qué es la tarima flotante? ¿Cuáles son sus características y ventajas?
El parquet flotante está hecho de tiras de madera que se unen entre si, por lo que son muy fáciles de montar. Además, flotan libremente sobre un subsuelo, por lo que es un importante aislante de la humedad y, por consiguiente, de las bajas temperaturas en invierno.
Algunos tipos de tablas de tarimas flotantes requieren de un tipo de adhesivo en las uniones, lo que requiere una serie de calzas y abrazaderas para mantener las tablas juntas mientras se seca el adhesivo. También existe una instalación de tarima flotante mucho más fácil, ya que las tablas se encajan sin ningún tipo de pegamento.
Los parquets flotantes están disponibles de madera natural o laminado, que es una superficie de plástico duro que ha sido impresa de manera convincente simulando madera natural. Las opciones laminadas resisten mejor los rayones, pero si se rayan no se pueden reparar y, en cambio, los de madera natural pueden ser pulidos. Si quieres pulir tu parquet recuerda que puedes alquilar una acuchilladora de parquet en Equipzilla.
Hay que tener en cuenta también que la tarima flotante elevará el nivel del suelo en unos 4 centímetros.
Algunas ventajas de colocar tarima flotante
- Se coloca una membrana de plástico, que sirve como barrera contra la aparición de humedad, entre el hormigón y el suelo de parquet.
- Los pisos de madera sintética son mucho más estables y resistentes a la humedad que la madera maciza. Por lo tanto, la tarima puede fregarse más a menudo que el parquet, ya que resiste mejor la humedad.
- Es fácil de color. Es relativamente sencillo de aprender, por lo que la mayoría de los aficionados al bricolaje pueden hacerlo en casa. Continúa leyendo para saber cómo colocar una tarima flotante en 7 pasos.
Cómo colocar tarima flotante en 7 pasos
En primer lugar, te damos la lista de materiales y herramientas que necesitas para realizar este proyecto en casa:
- Láminas de parquet, ya sean naturales o laminadas.
- Capa de amortiguación o membrana de polietileno, poliestireno o fieltro, ya se venden preparadas para parquet.
- Cinta adhesiva para unir la capa de amortguación que va entre la tarima y el suelo de hormigón.
- Cuñas
- Cinta métrica
- Martillo
- Barra de tracción
- Sierra circular u otra sierra eléctrica
- Espátula ancha
1. Prepara las tablas de parquet
Deja las tablas de parquet en la habitación durante dos días para que se aclimaten a la humedad. Abre las cajas y mezcla las tablas para que las variaciones de color se distribuyan de manera bastante uniforme por toda la habitación.
Deberás colocar la barrera contra la humedad de láminas de polietileno, de al menos 6 mil de espesor. Tira para eliminar las arrugas y que se superpongan las costuras 8 pulgadas o más. Luego, enrolla la capa base de espuma sobre el polietileno.
2. Coloca la capa aislante del subsuelo
Coloca la capa de amortiguación o membrana de polietileno, poliestireno o fieltro, que irá entre el suelo y la tarima flotante. Empalma los trozos de las piezas con cinta adhesiva, pero sin superponerlos.
3. Corta las tablas
Mide la superficie de la habitación y divide el resultado por el ancho y largo de las tablas para saber cuántas tablas necesitarás, de qué anchura y de qué longitud. Corta las tablas con una sierra eléctrica para que queden a 10 mm aproximadamente de la pared en cada extremo. Para ello puedes utilizar unas cuñas colocadas entre la tarima flotante y la pared para mantener siempre la misma distancia.
4. Coloca la primera fila de tarima flotante
Encaja la primera fila de tablas juntas de un extremo a otro ajustándolos a los límites de las cuñas con la pared.
5. Coloca el resto de la tarima flotante
Instala la siguiente fila de tablas de la misma forma y sigue las instrucciones del fabricante respecto a la compensación y encaja de los tablones entre si. Comprueba continuamente si hay espacios entre las tablas. A menudo es útil utilizar un trozo de madera y un martillo para cerrar los huecos o una palanca especial que proporciona el propio fabricante con la tarima y que ayuda a deslizar los tablones para que encajen entre si.
6. Coloca la última fila de parquet
Cuando llegues a la última fila, coloca calzas contra la pared y mide el ancho en varios lugares. Si la pared es muy recta, es posible que puedas cortar todos los tablones del mismo ancho, pero lo más probable es que necesites medir y cortar cada tablón individualmente.
Inclina la última fila y tira mientras la colocas para encajarla en su lugar. Puedes utiliza una barra de tracción para ajustar esta última fila.
7. Coloca los rodapiés
Coloca los rodapiés y clávalos con clavos a la pared, nunca al suelo, ya que debe poder moverse ligeramente para adaptarse a los cambios de temperatura y humedad. Sella todos los bordes expuestos para que la humedad no pueda filtrarse siguiendo las instrucciones del fabricante del parquet, ya que algunos recomiendan aplicar pegamento y otros recomiendan masilla de silicona.